jueves, 26 de noviembre de 2009

2012: La mejor peor mierda de la década

Ya está, ya la he visto. He ido al cine a ver 2012. Después de 3 cervezas y un menú Big Mac me dispuse a ver la película más esperada del año, la nueva joya del peor mejor director que ha parido este mundo, Ronald Emmerich. No os diré de que va porque ya todo el mundo lo sabe. Y si ya has visto las otras joyitas de Emmerich (vease El Día del Mañana o Independence Day), no hace falta explicar de que va la encantadora mierda de 2012. Va sobre el puto final del mundo, John Cusack de prota y ¡¡Danny Glover!! de presidente negro de los EE.UU (ya me veo a Eddie Murphy haciendo de presidente en una peli de estas características dentro de 10 años).

¿Porque digo que 2012 es la mejor peor mierda de la década? Básicamente porque es una mierda de película, larga de cojones, previsible y por encima de todo, una enorme fantasmada. Pero esta claro que todo eso lo sabíamos antes de entrar a la sala. De hecho lo sabíamos hace un año antes de ver el trailer. Pero da igual, como soy un auténtico masoca y disfruto como un crío con este tipo de películas, la fui a ver como un campeón. Y lo peor de todo es que me lo pasé teta.

Viendo 2012 podemos constatar que a Ronald Emmerich se la he ido la pinza de una forma definitiva. No hay marcha atrás. Su mente está deteriorada. Me lo imagino al tío andando por la calle. Normalmente, alguien normal en un día normal estaría pensando en como pagar las facturas, en la novia, en el curro... En cosas normales. Pero Emmerich, cuando pasea por la calle solo piensa en como sería la forma más espectacular de destruirla. Si va de turismo por Barcelona y ve la Casa Batlló, ¿crees que Emmerich está disfrutando de la obra de Gaudí? ¡No! El piensa cual sería la forma más increíble para destruirla. Así no se debe disfrutar de la vida. Me compadezco de Ronnie. Pobre Ronnie. Amo a Ronnie.

martes, 10 de noviembre de 2009

El último disco de Kiss - Sonic Boom

Parecía imposible pero Kiss han vuelto a las tiendas para vender algo relacionado con la música, es decir, un disco nuevo. Tras 10 años vendiendo muñecos de Kiss, monopolis de Kiss, Scalextrix de Kiss y tu puta madre de Kiss, los contables (y a veces músicos) Gene Simmons y Paul Stanley han decidido sacar un nuevo disco. Se llama Sonic Boom y para ir ya al grano os digo que es un disco de puta madre.
Antes de empezar, tengo que decir que me daba bastante igual que Kiss sacase disco. De hecho, esto no es Kiss sino los buenos de Gene Simmons y Paul Stanley con un guitarrista al que le tengo tanto asco que no pronunciaré su nombre y el auténtico rey de los mercenarios de la batería, Eric Singer. Sin Ace Frehley ni Peter Criss, Kiss pierde todo el sentido para convertirse en una simple máquina de hacer dinero a punta pala. Y lo consiguen, lo consiguieron y lo seguirán consiguiendo.
El Sonic Boom Ki$$, es un disco de dos caras. Por un lado tenemos 11 canciones originales que están bastante bien pero que podían estar mejor si tenemos en cuenta que hace 10 años no sacan un disco. De todos modos, como fan de Kiss no me puedo quejar. Los Ki$$ han hecho un disco digno con todos los ingredientes que le pides a este grupo: canciones de tías, beber y riffs de puta madre. Vamos, que es mejor que cualquier mierda que hicieron en los ochenta y noventa.
La otra cara de este disco es una desagradable sorpresa. Viniendo de Kis$$, algo bueno debe esconder siempre algo malo. Gene y Paul han sacado su lado de contable y han grabado todos los clásicos que hicieron en su época dorada con Ace y Peter Criss con los dos mercenarios de turno que trabajan ahora con ellos. De ese modo, Ace y Peter no verán un duro de los derechos de estas canciones.
¿Hacía falta?